jueves, 3 de mayo de 2018

I Encuentro Nacional Crónicas Nocturnas

El Succubus Club, donde se llevaba a cabo la actividad principal de las jornadas.

Con un poco de perspectiva, voy a analizar el evento al que acudí este fin de semana, el Encuentro Nacional que organizaba en Alcalá la gente de Crónicas Nocturnas. Un evento que tiene como eje los juegos de rol de la línea Mundo de Tinieblas, pero sobre todo ser un punto de encuentro para aficionados.

Lo primero que destaca en comparación con el anterior evento al que acudí (Cónclave de Tinieblas) es que aquí ya no se disponía del Castillo de San Servando en Toledo. En su lugar, la mayor parte del evento, así como el alojamiento (gratuito, eso sí) era en un colegio, y la partida gorda de rol en vivo en una nave industrial habilitada para ello. El alojamiento no lo caté, ya que cogí hotel, a 5 minutos del colegio. Al no tener todos misma comida y alojamiento, se resiente un poco el tema de la convivencia. Nada que reprochar, que no siempre es fácil conseguir un sitio de estas características, pero el cambio era objetivamente a peor, sobre todo por la parte de no tenerlo todo tan a mano como en el Castillo.

Vamos ahora con las actividades. Evidentemente no puedo hablar de todas, sino de aquellas en las que participé. Y ese era un punto fuerte del evento: la variedad. No habría ido si solo fuera la partida de rol en vivo. 

No voy a volver a enumerar las partidas en las que participé, que eso ya lo hice el lunes, sino que voy a dar mi visión sobre ellas. En ese sentido, es un acierto la cantidad y variedad de partidas y talleres que hay, así como la organización a la hora de apuntarse, de manera que antes de ir ya sabes qué vas a poder hacer, y no te quedas sin nada. Las instalaciones (el colegio) eran aptas, y no se aglomeraban varias partidas de rol de mesa en una misma sala. 

Ahora toca hablar de la actividad principal, el Succubus Club; la partida de rol en vivo que se jugaba las dos noches y en la que participaban todos los inscritos al evento. Antes de empezar debo aclarar que por motivos ajenos a las jornadas apenas pude participar, ya que el viernes apenas estuve una hora y el sábado ni fui, lo que debe ser tenido en cuenta a la hora de valorar mi crítica.

Mi sensación, el poco rato que estuve, no fue buena. Es un evento demasiado orientado a gente que es habitual de las crónicas y va de evento en evento con su personaje, continuando tramas, pero deja poco margen para los jugadores episódicos. En ningún momento vi nada que incentivara a mi personaje a introducirse, de forma coherente, en las tramas. No se trata de que no fuera fácil meterse en ellas, pero nunca he sido muy fan de "me meto en tramas para no aburrirme", y me gusta que haya algún tipo de coherencia narrativa para ello. Apostaron por hacerlo muy sandbox, pero creo que se pasaba. Estuve poco rato, pero lo cierto es que no me pesó demasiado no haber estado más, pues la sensación era la de "estar de invitado en una partida ajena". 

Hay que decir sobre esto que también me perdí los "Encuentros en el pasado", concepto que me parece una absoluta genialidad, escenas previas en las que se desarrollan relaciones entre personajes, de forma que tienen ya algo de ese enganche cuya carencia acabo de criticar.  Pero creo que ya desde la hoja de personaje (que ni recibí, era un simple "repites personaje") debería haber algo que motive siquiera al personaje para estar ahí. Y ese algo, en ningún momento lo encontré.

En cuanto al sitio, pues aunque es algo que no tardaron en solucionar, la primera sensación era de agobio, entre lo apretujado y sobre todo la música tan alta, que imposibilitaba cualquier intento de interpretar nada. 

Haciendo un balance, y de menos a más, el vivo "Succubus" me resultó un tanto decepcionante (hechas las mencionadas salvedades), pero el resto de actividades, y sobre todo la posibilidad de ver a la gente cumplieron de sobra las expectativas. Y teniendo en cuenta que la megapartida de rol en vivo no era lo que más me llamaba, la nota es positiva.

En resumen: ¿Es mi evento favorito? Mentiría si dijera que sí. ¿Repetiré en el futuro? Por supuesto.

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