Mucha cola para poca hostia.
El Sunday Market era un mercado de artesanía, ropa, comida y cosas en general que se organizaba hoy en el Museo Marítimo, pero no en la explanada, como creía, sino en el hall interior.
Esto significa que cuando hoy por la mañana nos acercamos a mirar, vimos una cola bastante larga, que hasta casi 40 minutos después no nos permitió entrar. Y lo que había no merecía demasiado la pena, pues además del exceso de gente, la música discotequera lo hacía todo muy agobiante, con todo apelotonado en poco espacio, y más ganas de salir que de quedarse. De lo poco reseñable, un par de trucos curiosos en el stand de una academia de magia (no era Hogwarts, he preguntado).
En otro orden de asuntos, también he ido al cine, a ver "12 años de esclavitud", sobre la que mañana me extenderé más, pero hago mención especial a dos espectadoras, una que tenía justo delante, y otra que tenía justo detrás. La de delante no parecía estarse divirtiendo demasiado con la película, pues se ha tirado prácticamente las dos horas mirando Twitter con el teléfono. Esto es cierto que sí se puede hacer algo molesto, ya que genera una fuente de luz que distrae la vista.
Nada especialmente insoportable, ya que basta con no mirar. Pero no parecía pensar lo mismo la señora que tenía detrás, que no contenta con comentarlo repetidas veces, y casi a voz en grito con el señor que la acompañaba, ha tocado techo cuando en un momento de la película me ha tocado el hombro para preguntar "¿Oiga, no le molesta que la chica esa esté todo el rato con el móvil?". Entre las respuestas legítimas habrían estado un rugido, un sopapo o una triple Nelson, pero me he limitado a gruñir algo parecido a "No tanto como la gente que se queja a voces en el cine". Aunque lamentablemente mi comentario ha sido vilmente ignorado por la señora. Niños en el cuerpo de adultos, a veces pasa.
1 comentario:
Yo les hubiera llamado la atencion a las dos señoras, tanto a la del movil como a la habladora. A mi en el cine no me joden, que para eso pago una entrada. En el sexto sentido tuve que llamarle la atencion a una señora que habia estado encendiendo y apagando el movil en varias ocasiones hasta que en la ultima se puso a hablar. Mi grito fue considerable, y la tia bien que apago el movil bastante avergonzada. Y en otra ocasion en el que estabamos solo 5 personas, Judith y yo mas tres chavalitas que no paraban de hablar, les dije que o se callaban o las echaba de la sala yo mismo.
Una anecdota mas de cine, en este caso no de gente molesta, sino de pelicula molesta. Estaba viendo Los Angeles de Charlie 2, si lo se, estaba solo una semana en casa y como no sabia que hacer me iba todos los dias al cine. Pues bien cuando llevaba 20 minutos de pelicula y veia que aquello solo podia ir a peor, pense, ¿Que hago aqui viendo esta mierda cuando puedo estar en casa jugando al Halo 3? Asi que me levante, y mientras bajaba las escaleras le hice una peineta a la pantalla, el resto del publico se puso a aplaudir y vitorear, jejeje. Es la unica vez que me he salido de un cine, y lo hice por la puerta grande ;)
Aun no he tenido los santos cojones de terminar de ver Los Angeles de Charlie 2.
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